jueves, 14 de julio de 2011

RENACIMIENTO


RENACIMIENTO


   Llega el amor y llega como la savia nueva que deshace los turbios rescoldos de la melancolía. Despierta en mí, en este loco verano de descubrimientos asombrosos, una parte delicadamente etérea que latía secretamente en mi interior.

La dulzura del veneno que definitivamente me inflama ha provocado ya cambios cuya dimensión y últimas consecuencias aún no puedo evaluar desde esta humilde atalaya.

Dejadme bailar este ritmo tórrido, esta danza llena de saudade y burbujas de champagne. Dejadme gozar de que al fin, este rompecabezas alegórico que es la vida, ha ido poco a poco acomodándose a los alucinados sueños que gobiernan los dilatados espacios de mi alma perturbada.

La Luna llena, esa dama maléfica, reina de las energías primordiales, se ha desposado esta mañana conmigo... E igual que magnetiza los mejores vinos y eleva con su delicada gracia los espíritus más exquisitos, ya presiento, en esta extraña hora, su brillante y erótica silueta pulsando ciertas notas perfumadas en mi ánimo.

Lo hermoso, lo terriblemente bello es que, de un modo inesperado y a bocajarro, soy completamente consciente de la terrible batalla que ha devastado tantos años mi atormentada psique.

Alcanzar la clarividencia es algo rematadamente simple. Cada átomo, cada enigmática molécula repiten un mismo mantra a aquellos oídos iniciados: no importa el tiempo que hayáis estado muertos si todavía comprendéis que estamos destinados a renacer…